Las Virtudes Se dice que cuando Dios creo el mundo para que los hombres prosperasen, decidió concederles 2 virtudes: A los suizos les hizo ordenados y cumplidores de la Ley. A los ingleses, persistentes y estudiosos. A los japoneses, trabajadores y pacientes. A los italianos, alegres y románticos. A los franceses, cultos y refinados. Y cuando llegó a los argentinos, se volvió hacia el ángel que tomaba nota y le dijo: -Los argentinos van a ser inteligentes, buenas personas y menemistas. Cuando acabó de crear el mundo, el ángel le dijo a Dios: -Señor, le diste a todos los pueblos dos virtudes y a los argentinos tres. Esto hará que prevalezcan sobre todos los demás. -Es verdad, bueno, como las virtudes divinas no se pueden quitar, que los argentinos a partir de ahora tengan tres, pero la misma persona no podrá tener más de dos virtudes a la vez. Así, el argentino que es menemista y buena persona, no puede ser inteligente. El que es inteligente y menemista, no puede ser buena persona. Y el que es inteligente y buena persona, no puede ser menemista.