DR. WOLF LUIS MOCHAN
BACKAL CENTRO DE CIENCIAS
FISICAS UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA DE
MEXICO Presente Me estoy permitiendo hacerle llegar el artículo
escrito por el Dr. Octavio Paredes, en colaboración con el Dr. Rafael Loyola,
titulado “La ciencia y la innovación en México, en la encrucijada”,
publicado el día de hoy en Aprovecho la ocasión para enviarle un cordial saludo. Atentamente, Lic. Luz Elena Cabrera C. Secretaria Ejecutiva Adjunta Consejo Consultivo de
Ciencias de la Presidencia de San Francisco No. 1626-305 Col. Del Valle Delegación Benito Juárez 03100 México, D.F. Teléfonos (52 55) 5524-4558, 5524-9009
y 5534-2112 Dr. Rafael Loyola Díaz* - Dr. Octavio Paredes López* | Opinión Miércoles 4 de
Febrero, 2009 | Hora de modificación: 04:16
La ciencia y la innovación en México, en la
encrucijada Al finalizar el año 2008 se publicó finalmente en el Diario
Oficial el Programa Especial de Ciencia y Tecnología (PECyT) para el periodo
2008-2012. En los círculos académicos se comenta que la aprobación tardía de
este documento refleja el escaso interés del gobierno panista en la generación
endógena de conocimientos y en Más allá de elementos ornamentales, el nuevo PECyT sólo
apuesta por el desarrollo tecnológico y la innovación, con un restringido
sentido utilitario del conocimiento. Los ejes sobre los que se estructura el
programa son los siguientes: a) La innovación como llave maestra para mejorar
competitividad y productividad, al igual que para enfrentar problemas
puntuales; b) Favorecer la articulación de los agentes del Sistema Nacional de
Ciencia y Tecnología (SNCyT) con las empresas; c) Incrementar la participación
de la iniciativa privada (IP) en el financiamiento de La filosofía del PECyT permite entender la consideración
del Conacyt sobre la relevancia de innovar para competir y la importancia de
incrementar la inversión en investigación y desarrollo tecnológico en las
empresas, así como el significado de la cadena
educación-ciencia-tecnología-innovación para lograr una economía más
competitiva, concepto que se repite a lo largo del programa. Del análisis sobre el estado que guarda el SNCyT, el
documento resalta las siguientes insuficiencias: a) Rezago en inversión en CTI,
lo cual explica que el país no se sitúa, en la materia, al nivel de su economía
ni de la posición que ocupa entre las principales economías del mundo; b)
Limitada participación de En seguimiento a los propósitos y objetivos que establece
el PECyT, conviene señalar que del año Las pequeñas y medianas empresas registran una limitada
absorción de tecnología y experimentan una pobre cultura de innovación;
aspectos que requieren de una atención especializada y cuidadosa. A pesar de
ello, los estímulos fiscales dieron preferencia a las grandes empresas
internacionales que no hacen investigación en México, otorgando mucha menor
atención a aquellas clasificadas como pequeñas y más que pequeñas. Además, se
sabe que los organismos receptores de estos generosos apoyos los destinaron
preferentemente para mantenimiento y aspectos técnicos de baja complejidad, muy
probablemente para pago de nómina, quizá hasta para evadir impuestos. En suma,
fue cuestionable tanto el mecanismo de selección como la falta de controles que
aseguraran el buen uso de tales estímulos. Empero, en el nuevo PECyT se canceló
de un plumazo el incentivo fiscal, no se rinden cuentas de los resultados
obtenidos ni de las razones que privaron en la decisión, y se sustituye por un
jugoso fondo de apoyos directos. Al menos, esperaríamos que se seleccionen
colegiadamente los destinatarios, con participación de mexicanos de
incuestionable honorabilidad y preparación ad-hoc, y se supervise la aplicación
de los recursos asignados Por otra parte, resulta ilustrativo que el modelo reciente
seguido por México ha generado saldos que se expresan en una acentuada baja de
la competitividad y en un estancamiento del registro de patentes nacionales,
entre otros. Se entiende que el avance de las grandes empresas internacionales
debe beneficiar también al entorno en el que se desarrollan; por ello, en otros
países emergentes se ha apoyado también el avance de estos organismos para la
generación de CTI, incluyendo la creación de parques tecnológicos y ciudades
del conocimiento, pero sin menoscabo de los grupos nacionales. De igual manera
se ha estimulado la asociación de las empresas de diversos tamaños y origen,
condicionando en algunos casos el apoyo, con universidades y centros nacionales
o locales generadores de conocimiento y entrenamiento de personal. Ello también
ha comprendido la supervisión del uso de tales estímulos. ¿Por qué no replicar
las experiencias de gestión exitosas en lugar de experimentar con mirada
limitada y excluyente? Por otro lado, el presupuesto de 43 mil 528 millones de
pesos aprobado por el legislativo para A cerca de 40 años de creación del Conacyt, que ha sido una
instancia importante en la ciencia mexicana, muestra ya signos de agotamiento
como lo ha señalado el ex rector de Los hechos demuestran fehacientemente que las declaraciones
de nuestros políticos y que los objetivos y metas del PECyT difícilmente se
cumplirán ya que, como regalo de Navidad, el Conacyt viene de anunciar que el
de por sí reducido número de becarios seleccionados -1,500- el año pasado para
cursar programas de calidad en el extranjero, se reducirá ¡a una tercera parte!
Hasta en Japón se reconoce la relevancia de incrementar el entrenamiento
doctoral y posdoctoral de jóvenes estudiantes en las mejores universidades del
mundo fuera de ese país, y ellos tienen 35 mil. El artículo editorial de *Octavio Paredes López es investigador
del Cinvestav-IPN, Irapuato, y miembro de *Rafael Loyola Díaz es investigador del
Instituto de Investigaciones Sociales de consejo_consultivo_de_ciencias@ccc.gob.mx |